Cortos, re-encuentros y fusilamientos
Habían comenzado las proyecciones del Outfest. El miércoles pasarían unos cortos en el Cultural de España que sea como fuere, quería ver. Le pasé el dato a Choborra sin darme cuenta que aquellos cortos eran de temática gay. El miércoles por la mañana me hizo hincapié en esto pero al final aceptó y se animó a bajar. Me dijo que llevaría a su vecina, aquella de la que tanto me había estado hablando en las últimas semanas. Dieron las 5 de la tarde. Un rato más hasta guardar el trabajo restante para el día siguiente, alistarme y apagar la computadora. Llegué en menos de 5 minutos puesto que mi trabajo queda a sólo 2 cuadras del lugar.
La sala parecía relativamente llena. Justo había comenzado la proyección así que no me perdí más que un toque del primer corto. Pasaba uno, pasaba otro. Llegó el corto de l@s Drag Queen. Estaba entrenido. La gente que llegaba tarde iba ingresando de rato en rato. En una de esas logré divisar la silueta inconfundible de Choborra que ingresaba acompañada. Dejé pasar un rato hasta que se ubiquen en la oscuridad. Les pasé la voz. En mi fila habían un par de asientos libres asi que se acomodaron a mi costado. Supuse que su acompañante era la tan mentada vecina asi que la saludé frescamente. Silencio. Procedimos a visualizar el siguiente corto. Era uno sobre una mujer que encaraba un tipo que, había despedido al hijo de ésta por el hecho de ser homosexual. ¡Bueno! Un par de cortos más y se presentó uno acerca de (según yo) el lado oscuro de Sigmund Freud. ¡Locazo! Uno más y la proyección había llegado a su fin. Buuu.
Choborra me volvió a repetir que Beatriz le había confirmado su asistencia. ¡Falla!. Rajamos un rato y luego salimos hacia la entrada para lorear un ratin. Choborra se había animado a acompañarme a Impacta. Le pasó el dato a su vecina a quien no le quedó más remedio que aceptar. Y mientras llenábamos la hojita de votación que nos dieron antes de ingresar a la sala, apareció Beatriz. Tardona -le dijimos-, el asunto ya fue. Salimos del lugar pero había que matar tiempo porque aún era temprano para ir a Impacta. Nos pusimos de acuerdo y nos fuimos al hueco de antaño: El Chino.
Beatriz y Choborra, por un lado, iniciaron su conversa acerca de arequipeñas, arequipeñas y más arequipeñas. Por otro, la vecina y Yo le dimos vuelta a la cerveza y los wantanes mientras rajábamos de esas dos flacas que no hacían más chismear de los agarres, calentados y trampas que existen en Arequipa city. Estuvimos ahi un rato. Se terminó la chela y el wantan; teniamos que fugar. Salimos del chino pero las flacas, dale y dale con Arequipa. Les recordé que íbamos a ir a Impacta. A Beatriz como que no le cuadró la idea a pesar que Choborra trató de animarla. Entonces les propuse ir al Twin. Ni Beatriz ni la vecina lo conocian. Pensaron un rato, cuadraron pa' la chanchita y listo. Ya en la couster Beatriz y yo nos fuimos poniendo al día. Hacía más de un año que habíamos perdido contacto e hicimos un review de lo que nos había estado ocurriendo en ese entonces. Mientras que Beatriz rehacía su vida con una nueva pareja que conoció en Arequipa; Yo aún continuaba batallando con el fantasma de la otra.
Llegamos al Twin. Choborra fiel a su estilo me acompañó a la barra para meterle floro a la dueña. Que por aqui, que por allá; un poco más y le pide conchas negras. ¡Fuira de acá! Una jarrita y sus bocaditos... ¡Listo! Tanta vaina para tan poca cosa. ¡Horror!
Iniciamos nuestro raje de cómo Choborra y Yo conocimos el lugar. Tuve que explicar que conocía ese hueco desde algún tiempo atrás y que para entrener a Choborra luego del finish con su "ex"; la llevé al Twin. Contamos también los entretelones de nuestros vacilones, jugarretas y calentonas en el lugar. Y ante la mirada casi incrédula de Beatriz y la vecina, tuvimos que explicar que toda la trama jugaba dentro del límite de la confianza existente. (Si, claro. Bien que a Choborra le gusta jugárselas de "lady").
Luego las chicocas se pusieron a hablar del canal de lesperu en el mirC; de arrobas, símbolos y no sé qué más. Como hasta la fecha no sé cómo ingresar ni usar el asunto ese, me limité a escuchar lo que contaban. Me enteré que la vecina era anfitriona del canal. También de los nicks "no sabidos" con los cuáles se conectaban Choborra y Beatriz:
La sala parecía relativamente llena. Justo había comenzado la proyección así que no me perdí más que un toque del primer corto. Pasaba uno, pasaba otro. Llegó el corto de l@s Drag Queen. Estaba entrenido. La gente que llegaba tarde iba ingresando de rato en rato. En una de esas logré divisar la silueta inconfundible de Choborra que ingresaba acompañada. Dejé pasar un rato hasta que se ubiquen en la oscuridad. Les pasé la voz. En mi fila habían un par de asientos libres asi que se acomodaron a mi costado. Supuse que su acompañante era la tan mentada vecina asi que la saludé frescamente. Silencio. Procedimos a visualizar el siguiente corto. Era uno sobre una mujer que encaraba un tipo que, había despedido al hijo de ésta por el hecho de ser homosexual. ¡Bueno! Un par de cortos más y se presentó uno acerca de (según yo) el lado oscuro de Sigmund Freud. ¡Locazo! Uno más y la proyección había llegado a su fin. Buuu.
Choborra me volvió a repetir que Beatriz le había confirmado su asistencia. ¡Falla!. Rajamos un rato y luego salimos hacia la entrada para lorear un ratin. Choborra se había animado a acompañarme a Impacta. Le pasó el dato a su vecina a quien no le quedó más remedio que aceptar. Y mientras llenábamos la hojita de votación que nos dieron antes de ingresar a la sala, apareció Beatriz. Tardona -le dijimos-, el asunto ya fue. Salimos del lugar pero había que matar tiempo porque aún era temprano para ir a Impacta. Nos pusimos de acuerdo y nos fuimos al hueco de antaño: El Chino.
Beatriz y Choborra, por un lado, iniciaron su conversa acerca de arequipeñas, arequipeñas y más arequipeñas. Por otro, la vecina y Yo le dimos vuelta a la cerveza y los wantanes mientras rajábamos de esas dos flacas que no hacían más chismear de los agarres, calentados y trampas que existen en Arequipa city. Estuvimos ahi un rato. Se terminó la chela y el wantan; teniamos que fugar. Salimos del chino pero las flacas, dale y dale con Arequipa. Les recordé que íbamos a ir a Impacta. A Beatriz como que no le cuadró la idea a pesar que Choborra trató de animarla. Entonces les propuse ir al Twin. Ni Beatriz ni la vecina lo conocian. Pensaron un rato, cuadraron pa' la chanchita y listo. Ya en la couster Beatriz y yo nos fuimos poniendo al día. Hacía más de un año que habíamos perdido contacto e hicimos un review de lo que nos había estado ocurriendo en ese entonces. Mientras que Beatriz rehacía su vida con una nueva pareja que conoció en Arequipa; Yo aún continuaba batallando con el fantasma de la otra.
Llegamos al Twin. Choborra fiel a su estilo me acompañó a la barra para meterle floro a la dueña. Que por aqui, que por allá; un poco más y le pide conchas negras. ¡Fuira de acá! Una jarrita y sus bocaditos... ¡Listo! Tanta vaina para tan poca cosa. ¡Horror!
Iniciamos nuestro raje de cómo Choborra y Yo conocimos el lugar. Tuve que explicar que conocía ese hueco desde algún tiempo atrás y que para entrener a Choborra luego del finish con su "ex"; la llevé al Twin. Contamos también los entretelones de nuestros vacilones, jugarretas y calentonas en el lugar. Y ante la mirada casi incrédula de Beatriz y la vecina, tuvimos que explicar que toda la trama jugaba dentro del límite de la confianza existente. (Si, claro. Bien que a Choborra le gusta jugárselas de "lady").
Luego las chicocas se pusieron a hablar del canal de lesperu en el mirC; de arrobas, símbolos y no sé qué más. Como hasta la fecha no sé cómo ingresar ni usar el asunto ese, me limité a escuchar lo que contaban. Me enteré que la vecina era anfitriona del canal. También de los nicks "no sabidos" con los cuáles se conectaban Choborra y Beatriz:
Choborra: Oye gata, y tu no entras al canal no?
Michi: Pucha, no sé como usar eso.
Choborra: ¿Queeee?
Ante la sorpresa de Choborra tuve que admitir que algo tan elemental para ese trio era totalmente desconocido para mi. Y bueno, de ahi continuaron armando la lista de nicks supuestamente conocidos. La vecina las escuchaba y se reía cada vez que alguna de ellas le preguntaba por sobre una u otra flaca. ¡No sé! se limitaba a decir. En fin.
De rato en rato me daba una escapada a la barra para también intercambiar palabras por otros lares. En una de esas no pudieron con su genio y me hicieron regresar al grupo:
Choborra: ¿Queeee?
Ante la sorpresa de Choborra tuve que admitir que algo tan elemental para ese trio era totalmente desconocido para mi. Y bueno, de ahi continuaron armando la lista de nicks supuestamente conocidos. La vecina las escuchaba y se reía cada vez que alguna de ellas le preguntaba por sobre una u otra flaca. ¡No sé! se limitaba a decir. En fin.
De rato en rato me daba una escapada a la barra para también intercambiar palabras por otros lares. En una de esas no pudieron con su genio y me hicieron regresar al grupo:
Beatriz: Oye y tú, metiéndole floro a la dueña.
Choborra: ¿Que pasa gata, acaso ahora quieres ser dueña del Twin?
Graciosas. Mientras dábamos curso a nuestra segunda jarrita, volvimos a lorear sobre Choborra y su "ex". De cómo la tenía su "ex" antes de, a cómo estaba ella ahora, después de. Pasó un rato más y Choborra nos habló de sus estudios, de lo que piensa hacer pronto y de sus planes de fuga del país. Y con esto, fue inevitable tocar un tema "picante" que se había suscitado por esos días:
Beatriz: Oigan chicas, dicen que nos van a fusilar. Uy Choborra, si es así y ese pata gana el 9, agarras tus maletas y fugas antes que tu vecina te delate.
Beatriz: Oigan chicas, dicen que nos van a fusilar. Uy Choborra, si es así y ese pata gana el 9, agarras tus maletas y fugas antes que tu vecina te delate.
Choborra: Vecina si tu me delatas, yo también te vendo. jajaja.
Vecina: jajaja. No vecina, no. Como crees.
Michi: Uyuyuy. Felizmente yo no tengo vecinas... jajaja.
Seguimos divagando sobre los pronunciamientos que habían ocurrido. De los candidatos GLBT, de nuestras preferencias electorales y de Bayly:
Beatriz: Oigan chicas, voten por la doctora Sacieta.
Michi: No, si entra al congreso se va a malear. Mejor voto por mi tía la Hildebrandt.
Beatriz: ¿Quee? Oye, ¿por esa tía? No te pases.
Choborra: No, no. Mejor voten por Susel Paredes.
Michi: No manita, paso.
Choborra: Pero, ¿por qué?
Michi: Simplemente por que no me identifico. Por eso.
Cuando llegó la hora de hablar de los votos presidenciales, Beatriz y Choborra dijeron que apoyaban a la futura presidenta. La vecina y Yo, dejamos saber que aún pertenecíamos al porcentaje de NS/NO.
Hablar de política es un tema tan candente que al rato nomás, se terminó la chela. Ya eran más de las 10 y teníamos que fugar. En el camino Choborra nos pasó el dato de que una flaca que ella conoce estaba de cumple en vísperas de las elecciones. Propuse hacer un último re-encuentro antes de las elecciones. Bien sea para ver cómo iban las encuestas. O tal vez, para nuestro último brindis. ¿Será acaso ese el brindis de la despedida, antes de que nos manden a fusilar? ¡En el dolor... Herman@s! Qué la razón nos ayude.
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