Mi FDS: Sábado 4
La gente del GPUC había organizado su "Reunión de Nuevos Amigos" para el sábado 4. Kyo ya me había avisado con semanas de anticipación que ese día saldríamos a la disco junto a sus amig@s hetero. Fue así que días antes tuve que ingeniármelas para poder alterar "un poco" los planes originales y poder hacer un "dobleteo" (junto a Kyo), ese sábado por la noche.
El sábado por la tarde, luego de cumplir con mi horario de trabajo, almorzar y rajar con Choborra por el MSN acerca de su FDS en la 13 ; fui al encuentro de mi compañero de clases. Teníamos asuntos pendientes por arreglar, intercambiar algunas ideas y ponernos al día. Pero la reunión terminó antes de lo que había calculado y fue asi que mi encuentro con Kyo se produjo más temprano que de costumbre. Pasaron las horas, llegó la noche y aún nos quedaba suficiente tiempo para ir a comer alguito. Como ambas reunas eran en el distrito de las flores, decidimos irnos por allá a comer alguito en el Pepe's.
Era un sábado por la noche tranquilo. El local estaba casi vacío y conforme pasaron los minutos, se llenó. Comenzamos a rajar de la gente y de lo que comían pues como estábamos en una esquina casi a la entrada, se podía apreciar todo el panorama. Pero entre conversa, raje y comilona ya nos habían dado las 9 y aún seguíamos allí.
GPUC había convocado a una reuna previa en el bar Los Cuadros a las 9 de la noche, así que lo siguiente era ir hacia ese lugar. Pasamos por el Bar pero al no ver ningún grupo de chicas, seguimos de largo hacia el Legendaris a ver si estaban ahi dentro. Fue en eso que delante de nosotras paró un taxi y bajaron dos chicas lo cual no me llamó la atención. Pero Kyo que me llevaba la delantera, notó que sacaban unos polos y me pasó la voz. Volteamos. Y al ver que sus polos de color amarillo llevaban la inscripción GPUC, decidimos acercarnos. Aquellas dos señoritas eran "anfitrionas" del grupo e hicimos las presentaciones previas. Viendo que aparentemente éramos las únicas personas presentes en el lugar, decidimos ingresar al Bar para tomar alguito e ir conversando mientras nos íbamos conociendo.
Allí dentro encontramos a una chica que había llegado rato antes y que sólamente tomaba "agua". Algo poco común en un Bar, pero bueno. Juntamos dos mesas y nos sentamos. Las anfitrionas se presentaron: Malú estudiante de Economía, 19 años. Chica de "mente abierta" -según dijo- y por lo cual su compañera la calificó como una "bisexual encubierta". Mariella, estudiante de Derecho, 21 años. Quien ante lo dicho por Malú manifestó que a ella le gustaban las mujeres y por lo tanto su pareja tenía que ser "bien" mujer. Risas y más risas. En fin.
En lo que me preguntaban por como así había llegado al grupo, si era de la Católica y quién había sido la anfitriona con la que contacté; mencioné que conocía a alguien del grupo a quien le decían "Marilia". Ahí fue que nos dimos cuenta que Liz... hasta en la sopa. Una de las anfitrionas llamó a Liz puesto que aún no llegaba y ya eran más de las 9:30. Al rato apareció Liz y también, Remo.
A Remo nunca lo había visto en persona. Sabía y conocía de él por sus escritos en la página de GPUC, por su página personal en la internet y por una presentación que hizo el grupo en la TV hace algunos años. Remo fue quien inició el grupo en la Católica y hasta lo que sabía se había ido de viaje. Finalmente había regresado y hacía su entrada al Bar: Alto, totalmente sin cabello, parecía un oso blanco por su contextura. Su expresión de felicidad sobrepasaba los límites de lo que alguna vez hubiera imaginado. Y fue con esa felicidad que genera el reencuentro que saludó a Malú con un fuerte abrazo llegando inclusive a cargarla. Se acercó a nuestra mesa a presentarse y saludarnos, estaba contento. Al parecer como estaba de pasada, había entrado a saludar a las chicas que estabamos allí porque al rato nomás se fue a la disco. Fue ocasión para hablar un rato con Liz que también al rato, se fue al Legendaris.
Volvimos a quedar ahi, charlamos un rato. Kyo me aviso que ya era hora de fugar. Nos despedimos momentáneamente aduciendo que volveríamos luego. Dificil. Teníamos que ir al Vale Todo: era la reunión por el cumpleaños de Alberto (uno de los amig@s de Kyo) que recientemente había salido del closet .
Amigos, conocidos y demás me habían hablado mucho sobre esa disco que por fin después de tantos años iba a conocer. Kyo tampoco la conocía así que la expectativa iba por partida doble. Al llegar, Rosita (hermana del "cumpleañero") estaba ya en la fila. La cola era larga y llegaba hasta la esquina, pero Rosita que estaba alli guardando sitio nos dió los pases y nos hizo pasar. Los amig@s de Kyo ya estaban ahí dentro. A ella la dejaron de "anzuelo" para que la gente que iba llegando tarde, pasara defrente.
Luego de la revisión respectiva y de caminar hasta cruzar una puerta, ingresamos. Kyo que venía pasos atrás, me alcanzó. Miramos a nuestro alrededor. El famoso Vale Todo no era ni un ápice de lo que hacía tantos años me había imaginado que era y a Kyo tampoco le hizo mucha gracia. Fue entonces que comenzamos a buscar a sus amigos.
Encontramos a la manchita de Kyo. Eran 5, no eran todos pero al menos estaban los más representativos que esperaban cerca a la puerta por si alguien más llegaba. Alberto, quién mostraba una sonrisa que no le cabía en la cara, nos fue presentando a todos los amig@s gay que habían llegado a celebrar su cumple. Eran muchos. Lo bueno fue que encontré uno que otro conocido asi que ya tenia alguien más con quien conversar. Estuvimos ahi un buen rato, conversando con un@s y con otr@s; tratando de ubicarnos y de ubicar los ambientes de la disco. Se esperaba la llegada de "la china" para completar el grupo. Llegó la susodicha y comenzó la movida.
Alberto nos llevó a todos en caravana hacia la sala de música electrónica. Comenzó el dancing. La música electrónica no es de mi particular predilección, pero para ser una disco que recien conocía estaba muy bien. Rato después, no sé si a él o a alguno de los amigos de Kyo se le ocurrió pasarnos al área latina. Otra vez, ahora todos en trencito, nos fuimos hacia el otro lado. La música era variada asi que nos quedamos buen rato hasta que a alguien se le ocurrió decir "cambio" y nos mudamos nuevamente de sala.
Lo mismo ocurrió unas 5 a 6 veces. ¡Locaso! Nunca había estado en esa situación de ir, venir, cambiar de sala y de ritmos musicales. Pero en la última mudanza y como la música de la sala latina se estaba poniendo buena jalé a Kyo y nos quedamos allí bailando. No exagero con decir que desde que comenzamos con el desfile de sala en sala hasta que nos cansamos de bailar habrán pasado casi dos horas sin descanso. Es que la música estaba bien surtida y había de todo. Desde la archi "mi dulce niña" hasta el "auto rojo" de Vilma Palma; pasando claro está por esas clásicas que yo bailaba en el "Zalonazo". Sólo faltaba la "Cocotera" para hacerla linda, pero en vez de esa se mandaron con full "Reggaeton" que por cierto cuando Kyo y yo comenzamos a bailarlo tal cual lo aprendimos en la 13, la gente a nuestro alrededor comenzó a observarnos como no sabiendo qué hacer. Al final todos le entraron a la "cochinada" y comenzaron a "coger" sin vergüenza.
Luego de nuestro largo dancing que incluyó movimientos de todo calibre; terminamos trapo. Por ahi estaba una amiga de Kyo que nos llevó a donde estaban l@s chic@s. Llegamos a los sofás, nos sentamos y ya no volvimos a levantarnos hasta las 5 de la mañana en que Kyo y yo salimos de la disco para tomar el carro de regreso a casa. De no ser por la dormitada que nos dimos a pesar de lo caluroso del ambiente alli en la discoteca no hubieramos podido continuar con nuestras labores cotidianas, ésa mañana. L@s amig@s de Kyo se quedaron allí, tirando la mona después de la borrachera que se dieron durante ese tiempo en que Kyo y yo nos la jugamos con nuestra maratón de "dancing" en la sala latina.
El sábado por la tarde, luego de cumplir con mi horario de trabajo, almorzar y rajar con Choborra por el MSN acerca de su FDS en la 13 ; fui al encuentro de mi compañero de clases. Teníamos asuntos pendientes por arreglar, intercambiar algunas ideas y ponernos al día. Pero la reunión terminó antes de lo que había calculado y fue asi que mi encuentro con Kyo se produjo más temprano que de costumbre. Pasaron las horas, llegó la noche y aún nos quedaba suficiente tiempo para ir a comer alguito. Como ambas reunas eran en el distrito de las flores, decidimos irnos por allá a comer alguito en el Pepe's.
Era un sábado por la noche tranquilo. El local estaba casi vacío y conforme pasaron los minutos, se llenó. Comenzamos a rajar de la gente y de lo que comían pues como estábamos en una esquina casi a la entrada, se podía apreciar todo el panorama. Pero entre conversa, raje y comilona ya nos habían dado las 9 y aún seguíamos allí.
GPUC había convocado a una reuna previa en el bar Los Cuadros a las 9 de la noche, así que lo siguiente era ir hacia ese lugar. Pasamos por el Bar pero al no ver ningún grupo de chicas, seguimos de largo hacia el Legendaris a ver si estaban ahi dentro. Fue en eso que delante de nosotras paró un taxi y bajaron dos chicas lo cual no me llamó la atención. Pero Kyo que me llevaba la delantera, notó que sacaban unos polos y me pasó la voz. Volteamos. Y al ver que sus polos de color amarillo llevaban la inscripción GPUC, decidimos acercarnos. Aquellas dos señoritas eran "anfitrionas" del grupo e hicimos las presentaciones previas. Viendo que aparentemente éramos las únicas personas presentes en el lugar, decidimos ingresar al Bar para tomar alguito e ir conversando mientras nos íbamos conociendo.
Allí dentro encontramos a una chica que había llegado rato antes y que sólamente tomaba "agua". Algo poco común en un Bar, pero bueno. Juntamos dos mesas y nos sentamos. Las anfitrionas se presentaron: Malú estudiante de Economía, 19 años. Chica de "mente abierta" -según dijo- y por lo cual su compañera la calificó como una "bisexual encubierta". Mariella, estudiante de Derecho, 21 años. Quien ante lo dicho por Malú manifestó que a ella le gustaban las mujeres y por lo tanto su pareja tenía que ser "bien" mujer. Risas y más risas. En fin.
En lo que me preguntaban por como así había llegado al grupo, si era de la Católica y quién había sido la anfitriona con la que contacté; mencioné que conocía a alguien del grupo a quien le decían "Marilia". Ahí fue que nos dimos cuenta que Liz... hasta en la sopa. Una de las anfitrionas llamó a Liz puesto que aún no llegaba y ya eran más de las 9:30. Al rato apareció Liz y también, Remo.
A Remo nunca lo había visto en persona. Sabía y conocía de él por sus escritos en la página de GPUC, por su página personal en la internet y por una presentación que hizo el grupo en la TV hace algunos años. Remo fue quien inició el grupo en la Católica y hasta lo que sabía se había ido de viaje. Finalmente había regresado y hacía su entrada al Bar: Alto, totalmente sin cabello, parecía un oso blanco por su contextura. Su expresión de felicidad sobrepasaba los límites de lo que alguna vez hubiera imaginado. Y fue con esa felicidad que genera el reencuentro que saludó a Malú con un fuerte abrazo llegando inclusive a cargarla. Se acercó a nuestra mesa a presentarse y saludarnos, estaba contento. Al parecer como estaba de pasada, había entrado a saludar a las chicas que estabamos allí porque al rato nomás se fue a la disco. Fue ocasión para hablar un rato con Liz que también al rato, se fue al Legendaris.
Volvimos a quedar ahi, charlamos un rato. Kyo me aviso que ya era hora de fugar. Nos despedimos momentáneamente aduciendo que volveríamos luego. Dificil. Teníamos que ir al Vale Todo: era la reunión por el cumpleaños de Alberto (uno de los amig@s de Kyo) que recientemente había salido del closet .
Amigos, conocidos y demás me habían hablado mucho sobre esa disco que por fin después de tantos años iba a conocer. Kyo tampoco la conocía así que la expectativa iba por partida doble. Al llegar, Rosita (hermana del "cumpleañero") estaba ya en la fila. La cola era larga y llegaba hasta la esquina, pero Rosita que estaba alli guardando sitio nos dió los pases y nos hizo pasar. Los amig@s de Kyo ya estaban ahí dentro. A ella la dejaron de "anzuelo" para que la gente que iba llegando tarde, pasara defrente.
Luego de la revisión respectiva y de caminar hasta cruzar una puerta, ingresamos. Kyo que venía pasos atrás, me alcanzó. Miramos a nuestro alrededor. El famoso Vale Todo no era ni un ápice de lo que hacía tantos años me había imaginado que era y a Kyo tampoco le hizo mucha gracia. Fue entonces que comenzamos a buscar a sus amigos.
Encontramos a la manchita de Kyo. Eran 5, no eran todos pero al menos estaban los más representativos que esperaban cerca a la puerta por si alguien más llegaba. Alberto, quién mostraba una sonrisa que no le cabía en la cara, nos fue presentando a todos los amig@s gay que habían llegado a celebrar su cumple. Eran muchos. Lo bueno fue que encontré uno que otro conocido asi que ya tenia alguien más con quien conversar. Estuvimos ahi un buen rato, conversando con un@s y con otr@s; tratando de ubicarnos y de ubicar los ambientes de la disco. Se esperaba la llegada de "la china" para completar el grupo. Llegó la susodicha y comenzó la movida.
Alberto nos llevó a todos en caravana hacia la sala de música electrónica. Comenzó el dancing. La música electrónica no es de mi particular predilección, pero para ser una disco que recien conocía estaba muy bien. Rato después, no sé si a él o a alguno de los amigos de Kyo se le ocurrió pasarnos al área latina. Otra vez, ahora todos en trencito, nos fuimos hacia el otro lado. La música era variada asi que nos quedamos buen rato hasta que a alguien se le ocurrió decir "cambio" y nos mudamos nuevamente de sala.
Lo mismo ocurrió unas 5 a 6 veces. ¡Locaso! Nunca había estado en esa situación de ir, venir, cambiar de sala y de ritmos musicales. Pero en la última mudanza y como la música de la sala latina se estaba poniendo buena jalé a Kyo y nos quedamos allí bailando. No exagero con decir que desde que comenzamos con el desfile de sala en sala hasta que nos cansamos de bailar habrán pasado casi dos horas sin descanso. Es que la música estaba bien surtida y había de todo. Desde la archi "mi dulce niña" hasta el "auto rojo" de Vilma Palma; pasando claro está por esas clásicas que yo bailaba en el "Zalonazo". Sólo faltaba la "Cocotera" para hacerla linda, pero en vez de esa se mandaron con full "Reggaeton" que por cierto cuando Kyo y yo comenzamos a bailarlo tal cual lo aprendimos en la 13, la gente a nuestro alrededor comenzó a observarnos como no sabiendo qué hacer. Al final todos le entraron a la "cochinada" y comenzaron a "coger" sin vergüenza.
Luego de nuestro largo dancing que incluyó movimientos de todo calibre; terminamos trapo. Por ahi estaba una amiga de Kyo que nos llevó a donde estaban l@s chic@s. Llegamos a los sofás, nos sentamos y ya no volvimos a levantarnos hasta las 5 de la mañana en que Kyo y yo salimos de la disco para tomar el carro de regreso a casa. De no ser por la dormitada que nos dimos a pesar de lo caluroso del ambiente alli en la discoteca no hubieramos podido continuar con nuestras labores cotidianas, ésa mañana. L@s amig@s de Kyo se quedaron allí, tirando la mona después de la borrachera que se dieron durante ese tiempo en que Kyo y yo nos la jugamos con nuestra maratón de "dancing" en la sala latina.
Etiquetas: LIVING - Mi ViDa LOCA
Q tal noche!
Provecho.
Posted by
Harvey Dent |
13/3/06 21:23
Wow me encanta. Esa noche también estuve en Legendaris :)
Posted by
Anónimo |
2/1/07 11:22